22 errores que podrías cometer en tu primer torneo de ajedrez


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Si es tu primer competición, pon atención a los siguientes errores que comúnmente cometen los principiantes durante su primer torneo de ajedrez.

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22 errores de comunes de principiantes en su primer torneo de ajedrez

Quizás vas a participar en un torneo de ajedrez por primera vez y no tienes un entrenador que haya platicado contigo sobre cosas tan básicas, como no olvidar presionar el reloj tras haber hecho un movimiento o apuntar las jugadas hechas en la papeleta. O quizás quieras recordar cómo fue tu primera experiencia en un torneo y los errores que cometiste durante el mismo.

Muchos de estos errores pueden ser sancionados o pueden costarte la derrota. Aquí te presentamos los errores típicos que todos alguna vez cometemos en nuestro primer torneo y que deben ser evitados.

Durante nuestro primer torneo a muchos nos ha pasado que gestionamos mal el tiempo durante nuestra partida. Muchas veces pensamos demasiado las jugadas o nos apresuramos a mover las piezas. Y el nerviosismo o el sentirnos agobiados por el entorno ocasiona que perdamos la conciencia del tiempo. Por eso, debes de procurar manejar tu tiempo pensando en todas las etapas de la partida: la apertura, el juego medio y el final de la partida.

Quizás eres de los que les gusta atacar en ajedrez y tu energía quiere ser desplegada en el tablero, o quizás simplemente te encuentras concentrado en tu estrategia o nervioso. En cualquier caso, en tu primer día del torneo es común olvidar o no considerar las amenazas que tu oponente fabrica en el tablero de juego.

El nerviosismo y la ansiedad es quizá el principal problema para muchos principiantes, porque te impiden concentrarte en tu estrategia, en las tácticas del oponente, en el cálculo de las jugadas. Por eso, antes de que que comience tu partida, procura mentalizarte y tranquilizarte realizando ejercicios de respiración o meditación.

Un error te lleva a cometer otros errores. Si subestimas a tu oponente porque su ELO es menor al tuyo o porque estás jugando con alguien de menor edad que la tuya o por cualquier otro motivo externo, la pagarás caro al final de la partida. Lo mismo sucederá si lo sobreestimas y desconfías de tus propias capacidades. Respeta a tu oponente y busca jugar de forma sólida o de la mejor manera cualquier partida del torneo.

Si siempre has jugado en línea y te presentas a un torneo sin haber ensayado lo suficiente en un tablero físico, puedes verte tentado a tocar una pieza y arrepentirte de querer moverla. Pero si tocas alguna pieza, tendrás que moverla. Y a algunos les ha pasado que tocan el rey para intentar el enroque, pero luego se dan cuenta de que dicha acción no procede de forma reglamentaria por encontrarse el rey en jaque. En estos casos, tendrán que mover el rey a otro casilla permitida.

Todo parece muy sencillo. Sólo tienes que llegar, esperar a que comience la partida y comenzar a jugar. Pero la realidad es que, debido a que estamos tan preocupados en el juego o en los movimientos que nosotros o el contrincante hacemos, olvidamos apuntar las jugadas en la papeleta de juego. Cuando nos percatamos de que no hemos anotado nada, terminamos por pedirle al rival que nos pase las jugadas realizadas.

Este error también es muy común en nuestro primer torneo. Ya movimos la pieza, y ¿ahora qué? Notamos que nuestro oponente no responde a nuestro movimiento realizado.

Si bien nos va, nuestro oponente nos avisa que debemos presionar el reloj tras haber movido nuestra pieza. Pero si no es así, nuestro reloj correrá hasta que lo volteemos a ver o nos demos cuenta de que nuestro tiempo se ha agotado. Este error es común porque muchos hemos jugado sin tener un reloj a la mano.

Analizas tus posibles jugadas con base en el problema que tienes en el tablero. Eso está muy bien. Pero a veces, tras analizar y querer volver al punto de partida para hacer tu movimiento, mezclas el análisis, te precipitas y mueves la pieza equivocada o en el orden equivocado. Eres presa de la ansiedad, y esa ansiedad es el origen de muchos errores garrafales en el ajedrez.

¿Sabías que hay una forma adecuada de ofrecer tablas en el ajedrez? En general, puedes ofrecerlas después de hacer tu movimiento y antes de presionar tu reloj. También se permite en algún otro momento del juego, siempre y cuando no sea con la intención de distraer o molestar a tu oponente.

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Quizás estés acostumbrado a enrocar usando las dos manos, porque nunca te enseñaron que el movimiento se hace con una mano moviendo el rey a la nueva casilla y luego colocando la torre en su nuevo lugar con la misma mano. Más aún, si tocas primero la torre, en lugar del rey, y tu oponente lo nota, él puede pedir la intervención del árbitro. Y con toda seguridad tendrás que mover tu torre a otra casilla.

Recuerda: con una misma mano mueve el rey y luego mueve la torre. Luego presiona el reloj y no olvides apuntar tu movimiento en la papeleta.

Por favor, nunca de los nuncas tengas un comportamiento antideportivo en tu primer torneo de ajedrez. Eso incluye: hacer ruidos molestos, como masticar algún bocadillo, hacer gestos con ruidos o golpear el tablero con tu pieza tras la captura de la pieza del oponente; distraer a tu oponente; no saludar con la mano a tu oponente; querer ganar fuera del tablero, etc.

Si es tu primer torneo, mejor haz bien las cosas y muestra cordialidad con otros jugadores que al igual que tú se presentan por primera vez en la competencia. Querer ganar en un juego no implica comportarte de forma abusiva. Si algo debe enseñar el ajedrez competitivo es ante todo una impecable formación personal y altos valores.

Un torneo más o menos grande suele presentar muchas distracciones a tu alrededor: gente hablando, camarógrafos tomando fotos de ti y de otros ajedrecistas, jugadores discutiendo, ruido por el movimiento de sillas… Todo se conjuga para que sea difícil concentrarte y termines molesto por las inconveniencias.

Pero de eso se trata la concentración. Tiene que importarte más tu partida que todo lo que sucede fuera de ella. Así que antes de pensar en el ruido de las sillas, piensa en el resultado final adverso de la partida si no eres capaz de concentrarte. Deja que los árbitros se encarguen del ruido.

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Quizá sea uno de los aspectos menos trabajado a nivel competitivo. Suele dedicarse mucho tiempo al análisis técnico de las partidas, pero en general poco o nada se trabaja con las emociones de los ajedrecistas. Y cuando llega la hora de participar en tu primer torneo, lo que ocurre en el exterior afectan tus pensamientos y no te permiten desempeñarte adecuadamente o, incluso, pueden darte una mala imagen si no puedes controlarte.

Es necesario que aprendas a hacer conciente lo que sientes en distintos momentos o situaciones. Eso te ayudará a conocerte y te dará un margen de maniobra para adaptarte sin problemas. Y los ejercicios de meditación pueden ayudarte si le dedicas tiempo. No dudes en investigar más sobre el tema.

Esto es parte del manejo de tu tiempo disponible. Pero en concreto nos referimos a que debes saber de antemano de cuánto incremento dispones para que, en situaciones apremiantes, cuando el tiempo se acaba (por lo general en los finales), no termines moviendo tu pieza ni tan rápido ni tan lento.

Los jugadores experimentados suelen llegar tarde a su partida, porque ellos ya saben cómo administrar su tiempo y tienen estudiado su plan. Pero si es tu primer torneo, llega antes de que comience tu partida, eso te dará tiempo para comenzar con tranquilidad y mentalizarte.

Muchos jugadores también llegan tarde a la partida para incomodarte y tener una ventaja psicológica sobre ti. Relájate y no le prestes atención.

No todos los torneos tendrán disponibles los materiales de juego para todos los competidores (reloj, tablero y piezas de ajedrez, pluma para anotar las jugadas). Revisa la convocatoria del torneo. En ella encontrarás las indicaciones de lo que tendrás que llegar contigo en cada partida.

Hay jugadores que pierden mucho tiempo en su primer torneo anotando la notación ajedrecística. La realidad es que nunca estuvieron acostumbrados a hacerlo y suelen cometer errores al anotar cada movimiento en la papeleta. Y si existe alguna controversia durante el juego, la correcta anotación de la notación en la papeleta es el único elemento del que dispones para defenderte en caso de que tu oponente quiera pasarse de listo.

También pueden ocurrir dos situaciones: tras anotar el movimiento, olvidan parar su reloj o, por otro lado, tras parar el reloj, olvidan anotar su movimiento. Elige una de las dos opciones: 1) mueve, para el reloj y anota tu movimiento o 2) mueve, anota tu movimiento y para el reloj. Recomendamos que utilices la primera opción, ya que de esta forma no perderás tiempo por anotar tu movimiento.

Es vital que conozcas las reglas y procedimientos del torneo. Si tienes entrenador o maestro de ajedrez, platica con él para que, en caso de que se dé una situación no contemplada, sepas qué hacer. Tienes que saber qué ocurre en caso de empates en la clasificación o si hay alguna regla distinta a la que se publica en el manual de la FIDE.

En general, lleva algo ligero de comer o beber en cualquier formato de juego, y aún más si son partidas clásicas, ya que éstas te demandarán suficiente energía para pensar y mantener la concentración. Tu energía puede menguar y podrías perder la partida o la ventaja de una buena posición por un hecho tan simple como el agotamiento mental y físico.

Los árbitros están para facilitar el desarrollo del juego en caso de controversias o cuestiones relacionadas con el juego. Si tienes duda de algo, no dudes en aclararla en el momento adecuado.

Si en algún momento viste esos videos de cómo dar mate en 3, 5 o cualquier cantidad de movimientos, es mejor que te olvides de intentarlo en un torneo.

Si bien estas estratgias pueden resultar divertidas aprenderlas y jugarlas con tus amigos o familiares, no siempre son prácticas en torneos oficiales o competitivos. ¿Por qué? Por dos razones: 1) porque seguramente otros ya vieron ese mismo video, y tu oponente podría contratacar eficazmente; 2) porque tienes que aprender a jugar con deportividad y tratar a tu oponente con respeto. Si juegas bien, simplemente tendrás buenos resultados la mayoría de veces.

Recuerda, el éxito en el ajedrez y el mejor provecho del mismo radica en la comprensión del juego, no de trucos básicos.

Las victorias nos llenan de alegría, pero aprender de nuestras derrotas nos ayudará a mejorar y a no perder de la misma manera. No tires a la basura tu papeleta de juego por desilusión; mejor analíza tu partida cuando el sabor amargo de la derrota haya pasado y vuélvete más fuerte.

Si has leído hasta aquí, estarás mejor preparado para saber qué es lo que debes tener en cuenta en tu primer torneo de ajedrez. ¡Que tengas buena suerte y mucho éxito!